El Tercer Paraíso de Pistoletto llega a Courmayeur, hecho de troncos de abeto

La instalación de Michelangelo Pistoletto dedicada al Tercer Paraíso se ha presentado al público esta mañana en Courmayeur (Valle de Aosta). La localidad del Valle de Aosta se ha convertido así en una de las embajadoras del proyecto cultural con el que Pistoletto, uno de los artistas italianos vivos más importantes, difunde por todo el mundo un poderoso símbolo de paz y regeneración.

La instalación, realizada íntegramente con troncos de abeto local, mide 54 metros y está diseñada para durar al menos quince años. Para fabricarla se utilizaron troncos precortados, por lo que no hubo que talar ningún árbol: los troncos se colocaron y, en algunos casos, se cubrieron con discos de acero espejados.La obra fue creada para inspirar una transformación de la sociedad, resumiendo en un solo signo (dos círculos exteriores, uno central) la complejidad de lo existente: de la unión entre los polos opuestos de la naturaleza y el artificio surge un espacio liminal lleno de potencial, generador de renacimiento.

“El Tercer Paraíso”, explica Pistoletto, “quiere subrayar la conexión entre el cielo y la tierra y su biodiversidad, así como el sentido de la medida, la proporción, la armonía, que debe aplicarse no sólo en términos cuantitativos, sino también cualitativos y éticos. El Tercer Paraíso significa el paso a un nuevo nivel de civilización planetaria, indispensable para garantizar la supervivencia de la raza humana”.

Courmayeur y Val Ferret pasan así a formar parte de una red de lugares que se extiende de Addis Abeba a Tokio, de Medellín a Sarajevo, pasando por varias ciudades italianas, y que a través de la presencia del Tercer Paraíso de Pistoletto pretende promover la armonía, la sostenibilidad y el respeto por el medio ambiente

El Tercer Paraíso de Pistoletto llega a Courmayeur, hecho de troncos de abeto

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