Urbino, réplica en alta definición 1:1 del Retablo de Montefeltro instalada en su iglesia

Con motivo del sexto centenario del nacimiento de Federico da Montefeltro (Gubbio, 1422 - Ferrara, 1482), el Retablo de Montefeltro vuelve a Urbino: pero no se trata del regreso del original, que se encuentra en la Pinacoteca di Brera, sino de una réplica de alta fidelidad a escala 1:1 realizada por Haltadefinizione, empresa del grupo Franco Cosimo Panini Editore especializada en la digitalización y reproducción de obras de arte.

La réplica se instalará en la iglesia de San Bernardino, donde reposan los restos mortales de Federico y su hijo Guidobaldo, y donde en su día estuvo el retablo: en 1811, el retablo fue requisado por soldados franceses que se lo llevaron a Milán, y de allí nunca se movió. En aquella época, Piero della Francesca no gozaba de gran admiración porque no reflejaba el gusto artístico de Napoleón: así, la obra maestra, en lugar de partir hacia Francia, fue enviada a la Pinacoteca di Brera, y pasó así a formar parte de la colección milanesa.

La colocación de la réplica del Retablo de Montefeltro en el mausoleo de Montefeltro forma parte de las iniciativas para valorizar los territorios del duque de Urbino, aquí retratado en una de las representaciones más icónicas. La reproducción de la obra maestra restaura fielmente tanto los colores como la superficie de la obra, haciendo claramente visibles la forma y las pinceladas.

La tecnología", afirma Luca Ponzio, Director General de Haltadefinizione, “permite reproducir fielmente una obra de arte y devolverla a su lugar de origen, experimentando nuevos enfoques para la valorización y difusión del arte”. El traslado del retablo monumental de Piero della Francesca, artista profundamente vinculado a la corte de Urbino y al duque de Montefeltro, nos hace comprender plenamente cómo la replicación es una herramienta que permite llenar un vacío, devolviendo al territorio y a la comunidad una obra de arte que se conservaba en otro lugar".

La digitalización gigapíxel permite obtener réplicas digitales de alta resolución de las pinturas: el fruto de la aplicación de esta tecnología son imágenes muy detalladas compuestas por miles de millones de píxeles que permiten investigar -y recrear- la obra hasta en sus más mínimos detalles. Gracias a las últimas técnicas fotográficas, es posible replicar un cuadro y situar la copia en el lugar donde fue encargado, concebido o incluso simplemente imaginado.

Urbino, réplica en alta definición 1:1 del Retablo de Montefeltro instalada en su iglesia

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