La Piedad de Fra Semplice vuelve a Mantua durante cinco años gracias a Uffizi Diffusi

La Piedad con San Juan Bautista y Santa Catalina de Alejandría de Fra Semplice da Verona regresa al Palacio Ducal de Mantua: en efecto, el cuadro se expondrá en la sede del museo de Mantua, en la pequeña capilla del Apartamento Ducal, a lo largo del recorrido de visita de la Corte Vecchia, a partir del sábado 16 de marzo. Depositada en las Galerías de los Uffizi, la obra del pintor capuchino activo en Mantua entre 1621 y 1622 y hacia principios de los años 40, es un encargo de los Gonz aga y data de 1621, cuando el ducado estaba gobernado por Ferdinando Gonzaga y su esposa Catalina de Médicis.

El cuadro permanecerá en Mantua durante cinco años gracias al préstamo que forma parte del proyecto Uffizi Diffusi. “Estamos muy contentos con este préstamo de cinco años”, declaró el director del Palazzo Ducale, Stefano L’Occaso, “porque nos permite integrar la sección del siglo XVII de las colecciones del museo con una pieza preciosa más. Un sincero agradecimiento al nuevo director de los Uffizi, Simone Verde, que ha aceptado el préstamo, y a su predecesor Eike Schmidt, con quien hemos planificado y realizado el proyecto”. La Piedad de Fra Semplice da Verona complementa además la disposición delApartamento Ducal, recientemente renovado, donde se exponen numerosas obras del siglo XVII procedentes de las colecciones del museo. Hasta ahora, el recorrido no contenía ningún cuadro del pintor capuchino al servicio de la familia Gonzaga.

Fra Semplice da Verona, fraile capuchino, antiguo pintor de la corte de Ranuccio Farnese, duque de Parma y Piacenza, entró al servicio de Ferdinando Gonzaga en 1621 y permaneció en Mantua hasta el año siguiente, cuando se vio obligado a abandonar la corte mantuana acusado de mantener relaciones con una damisela de la corte llamada Bianca. La Piedad fue pintada para la esposa del duque Catalina de Médicis y su encargo está evocado por la presencia de Santa Catalina de Alejandría. En el cuadro se aprecia la influencia de Domenico Fetti, por aquel entonces pintor de corte de la familia Gonzaga, de quien Fra Semplice absorbió las sugerencias de la pincelada fluida y luminosa. La obra llegó más tarde a la corte de los Médicis como regalo diplomático, bien de los duques de Mantua, bien de la propia Catalina. El fraile pintor se dirigió a Génova y luego a Roma, donde conoció los favores del mecenas , el cardenal Montalto, con una carta de Ferdinando Gonzaga en la que se mencionaban los “buenos servicios” del artista en Mantua. Fra Semplice tuvo que regresar al Véneto unos años más tarde, pasar por Parma y volver de nuevo hasta 1642, cuando regresó a Mantua a petición de Maria Gonzaga, hija de Francesco IV y regente del ducado. Aquí trabajó como pintor hasta el final de su actividad hacia la década de 1650.

Con motivo de la festividad de San Anselmo, patrón de la ciudad, el lunes 18 de marzo el Palacio Ducal de Mantua abrirá de forma extraordinaria de 8.50 a 19.15 horas (última entrada a las 18.20 horas). Ese mismo día, también habrá un servicio de visitas guiadas con salidas fijas a las 11.10 h y a las 15.10 h a un precio de 7 euros por persona (reservas a través del centro de atención telefónica 041 2411897 o de la web www.ducalemantova.org) y un servicio de visitas temáticas acompañadas con el itinerario Tras las huellas de Isabel de Este, salidas a las 9.30 h, 11.30 h, 14.30 h y 16.30 h (gratuito con una entrada al museo a partir de 5 euros, reservas a través del infopoint 0376 352100).

La Piedad de Fra Semplice vuelve a Mantua durante cinco años gracias a Uffizi Diffusi

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