Selinunte, tres gigantescas columnas del Templo G serán reensambladas y reubicadas. La gran obra comenzará


A finales de 2022, la Región de Sicilia publicará la licitación para poner en marcha la gran obra destinada a obtener nuevos datos sobre el Templo G de Selinunte, restaurarlo y volver a montar partes del mismo. Tres gigantescas columnas del templo serán reubicadas.

A propuesta del consejero de Patrimonio Cultural e Identidad Siciliana, Alberto Samonà, el gobierno regional saliente, con una financiación de 5 millones de euros, ya ha aprobado el "Proyecto de valorización del Parque Arqueológico de Selinunte", que prevé un gran proyecto de estudio y restauración. A finales de 2022, la Región de Sicilia publicará la licitación para iniciar la gran obra, destinada a la adquisición de nuevos datos y conocimientos sobre el templo selinuntino, la restauración y recomposición de algunas partes, incluidas las tres gigantescas columnas del lado sur (cuyos elementos estructurales se han identificado con certeza), que serán reubicadas con sus capiteles. También se recuperará el llamado"Fuso della Vecchia", la columna restaurada en 1832 por el escultor Valerio Villareale, por encargo del duque de Serradifalco. La recomposición del Templo G había sido preconizada en su momento por Sebastiano Tusa, antes de convertirse en consejero, arqueólogo y superintendente del mar. Incluso Vittorio Sgarbi había anunciado su intención de reconstruir el Templo G ya en 2018.

El gran plan es, por tanto, devolver al Templo G de Selinunte su majestuosidad: el templo data del siglo V a.C., mide nada menos que 109 metros de largo y 50 de ancho; cada columna tenía más de 16 metros de altura y el edificio entero alcanzaba unos 30 metros. La construcción duró varias décadas y sus elementos nunca se terminaron, pero estaba completo en su estructura arquitectónica y en su uso. Probablemente por causas naturales, el templo se derrumbó.

“Esta será una gran obra de conocimiento”, comentó Alberto Samonà, “porque permitirá al mundo entero descubrir la majestuosidad de este edificio sagrado, considerado uno de los más grandes de la antigüedad clásica”. El traslado de las tres grandes columnas es una operación cultural de alcance internacional, la tarjeta de visita de una Sicilia que mira al futuro en nombre de su historia y su identidad cultural, y de una visión mediterránea y cosmopolita, que pretende devolver la centralidad a la isla. Un sueño hecho realidad que permitirá a todos darse cuenta de lo que fue este gran templo de la antigüedad. Un proyecto que atraerá la atención del mundo hacia Selinunte, con un impacto inevitable en el número de visitantes que querrán descubrir el parque arqueológico en el futuro".

Durante más de un año, el personal ha estado trabajando a instancias del concejal Alberto Samonà y con el pleno apoyo del presidente Musumeci; la coordinación técnica se ha confiado al Departamento de Patrimonio Cultural de la Región de Sicilia, con el director general Franco Fazio, el responsable del servicio de planificación, Carmelo Bennardo, y el director del parque arqueológico de Selinunte, Felice Crescente.

"El proyecto comenzó en 2010, gracias a las investigaciones dirigidas por Mario Luni, de la Universidad de Urbino, promovidas por Valerio Massimo Manfredi", explicó el arqueólogo Oscar Mei. "Investigaciones que se reanudaron bajo mi dirección de acuerdo con el Parque de Selinunte, por invitación del concejal Sebastiano Tusa, y condujeron a la adquisición de datos sobre la construcción del Templo G. Nuevas investigaciones podrán conducir a la recomposición de tres columnas del lado sur del Templo, cuyos elementos estructurales, ahora derrumbados con el interior del edificio, han sido identificados con certeza y están casi completos hasta el capitel. Esta fase del proyecto es de enorme importancia para la puesta en valor y disfrute del Templo y será decisiva para su conservación y protección. También estamos trabajando en un comité asesor del que formará parte Luigi Malnati, antiguo Director General de Antigüedades del MIBACT. Por supuesto, debemos recordar a los estudiosos y amigos, ya fallecidos, que tanto tiempo y energía han dedicado al Templo G en los últimos doce años: Sebastiano Tusa, Mario Luni y Gastone Buttarini, restaurador y diseñador de Urbino".

Las investigaciones preliminares ya están en marcha, y también se han iniciado los escaneados tridimensionales del Templo G, que permitirán una reconstrucción virtual del identikit del monumento. Están previstas prospecciones archivísticas, bibliográficas e iconográficas, el levantamiento fotogramétrico y el escaneado láser en 3D, así como la cartografía de los materiales con los que se construyó.

El proyecto permitirá seguir sus fases: se instalará un rincón multimedia y se proyectará una reconstrucción virtual del Templo con una película, explicada también a través de un cómic sobre las técnicas de construcción de los monumentos clásicos.

Imagen: Las ruinas del Templo G de Selinunte. Foto Crédito

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Selinunte, tres gigantescas columnas del Templo G serán reensambladas y reubicadas. La gran obra comenzará


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