Pompeya, finalizada la restauración del gran fresco del viridarium de la Casa de los Ceii

En Pompeya, ha concluido la restauración del gran fresco que decora la pared trasera del viridarium (jardín) de la Casa de los Ceii. Se trata de una escena de caza con animales salvajes, pintada sobre el fondo de un paisaje que recuerda a Egipto, con animales del delta del Nilo representados en las paredes laterales. Estos temas eran a menudo recurrentes en la decoración de los muros perimetrales de los jardines pompeyanos. En este caso, con toda probabilidad, según los expertos del Parque Arqueológico de Pompeya, el tema de las pinturas testimoniaba también un vínculo y un interés específicos que el propietario de la domus tenía por el mundo egipcio y el culto a Isis, especialmente extendido en Pompeya en los últimos años de vida de la ciudad.

El fresco con la escena de caza

La restauración

A lo largo de los años, debido a la falta de un mantenimiento adecuado y al uso de prácticas de restauración inadecuadas, se ha producido un deterioro progresivo de las pinturas y los consiguientes daños en los frescos, especialmente en las partes inferiores, donde la humedad tiene mayor influencia. El complejo proyecto de restauración dirigido por Stefania Giudice (directora de obras), Luana Toniolo (directora de operaciones arqueológicas) y Raffaella Guarino (directora de operaciones de restauración) y realizado por la empresa RWS de Padua, consistió en la limpieza de la película pictórica, utilizando también el láser, lo que permitió limpiar importantes porciones de la pintura, especialmente en la parte de la decoración botánica del fresco. Las partes erosionadas de la pintura se restauraron mediante una operación de retoque pictórico. Se cerró toda la zona para evitar futuras filtraciones de agua de lluvia y preservar adecuadamente la zona. La intervención se llevó a cabo con fondos ordinarios del Parque Arqueológico de Pompeya.

“Cuando pudimos iniciar esta intervención, había una situación bastante grave que afrontar”, explica Stefania Giudice, “sobre todo en lo que respecta a las partes inferiores del fresco, las más sujetas a fenómenos de degradación, como la subida capilar del agua, que arrastra consigo las sales solubles que producen eflorescencias en la película pictórica, produciendo daños muy graves e incluso, por desgracia, definitivos”. En concreto, el trabajo más difícil de realizar fue en primer lugar la consolidación, porque había una serie de desprendimientos a todos los niveles de la estratificación del yeso y también a nivel de la película de pintura, pero luego sobre todo la limpieza, porque también había depósitos muy tenaces en la superficie de la película de pintura, que requerían una limpieza tanto química como mecánica. Al final, también tuvimos que recurrir al uso del láser, porque sólo así pudimos recuperar partes, sobre todo en la parte inferior, pero no sólo ahí, incluso en la escena de la caza, donde había sustancias muy incrustadas que se resistían a cualquier tipo de intervención. Por lo tanto, pudimos recuperar una gran parte de esta decoración botánica que estaba en la base del fresco, que antes era realmente apenas legible y estaba completamente borrada por estos depósitos superpuestos".

El fresco con la escena de caza

La Casa de los Ceii

La casa de los Ceii, excavada entre 1913 y 1914, representa uno de los raros ejemplos de vivienda antigua de finales del periodo samnita (siglo II a.C.). La propiedad de la domus se ha atribuido al magistrado Lucius Ceius Secundus, basándose en una inscripción electoral pintada en la fachada exterior de la casa. La fachada de la domus, con su revestimiento de estuco blanco y el alto portal coronado por capiteles cúbicos, ilustra el aspecto severo que debió de tener una casa burguesa de finales del periodo samnita (siglo II a.C.). En el centro del atrio tetrástilo se encuentra la peculiar pila impluvium, realizada con fragmentos de ánforas colocados en forma de corte, según una técnica muy extendida en Grecia pero de la que Pompeya sólo encuentra otra comparación en la Casa de la Antigua Caza.

En los últimos años, la domus había sido objeto, en el marco del Proyecto Gran Pompeya , de obras dereurbanización, regimentación de las aguas pluviales y mantenimiento de las cubiertas, que se habían hecho necesarias debido a una progresiva pérdida de funcionalidad de las mismas. Esta degradación estaba exponiendo a las estancias inferiores, caracterizadas por yeserías decoradas y suelos valiosos, a un grave riesgo de deterioro. En la casa se había reutilizado parte de la distribución original de la vivienda, con la reubicación de la mesa de mármol y la boca del pozo en el vestíbulo, donde también son visibles un molde de un armario y un molde de la puerta de entrada a la casa. Mientras que en la cocina puede verse una pequeña piedra de molino doméstica.

Pompeya, finalizada la restauración del gran fresco del viridarium de la Casa de los Ceii

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