Gracias al uso de las nuevas tecnologías, se están llevando a cabo investigaciones arqueológicas que revelan nuevos elementos sobre la colosal dársena imperial hexagonal: más de 357 metros por lado y una superficie aproximada de 32 hectáreas, en el complejo portuario de Claudio y Trajano.
Las primeras investigaciones sobre la dársena comenzaron en febrero de 2021 con el objetivo de adquirir datos exactos sobre las características constructivas de la dársena portuaria, en relación con su frecuentación y uso, con la creación de documentación y la recuperación de cualquier evidencia útil para la reconstrucción de las diversas fases de la vida, en sentido sincrónico y diacrónico, del puerto marítimo más importante de la antigüedad. La prospección forma parte de las actividades del Parque Arqueológico de Ostia Antica, bajo la coordinación del Director del Parque Arqueológico, Alessandro d’Alessio, y la Jefa del Servicio de Protección del Patrimonio Cultural Subacuático, la arqueóloga subacuática Alessandra Ghelli.
Las primeras prospecciones subacuáticas, realizadas con el apoyo técnico operativo de la Unidad Subacuática de los Carabinieri de Roma y de la Unidad Tpc de los Carabinieri de Roma, permitieron recuperar varios fragmentos de cerámica atribuibles a contenedores de transporte (puntas y cuellos de ánforas, asas) y materiales de construcción (ladrillos y tejas).
Ahora está en marcha una nueva fase de investigación de la cuenca, incorporada a una propiedad privada y gestionada por la Fondazione Portus Onlus, que permite su uso desde 1993.
“La visibilidad dentro de la cuenca hexagonal, debido a la calidad del agua y a las características del sedimento que cubre su fondo, es casi nula”, explica Alessandra Ghelli a ANSA. “El nuevo impulso a las actividades viene dado por el uso de nuevas tecnologías, recurriendo a la instrumentación geofísica marina aplicada al patrimonio cultural”.
Las nuevas tecnologías aplicadas a la arqueología desvelan el puerto hexagonal de Trajano |
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