Extraordinario descubrimiento en Cerdeña: un enorme tesoro de monedas romanas bien conservadas

Excepcional descubrimiento arqueológico en Cerdeña: en el mar frente a la costa noreste de la isla, en el municipio de Arzachena, se ha descubierto un rico yacimiento de follis, antiguas monedas de bronce introducidas hacia 294 con la reforma monetaria del emperador Diocleciano, que datan de la primera mitad del siglo IV d.C. Según una primera estimación, realizada sobre la base del peso total del hallazgo, el número de monedas de bronce de gran tamaño se situaría entre 30.000 y 50.000. Muchas más, por tanto, que las halladas en 2013 en el Reino Unido, en Seaton, cuando resurgieron 22.888 follis. Además de estas últimas, también se encontraron paredes de ánforas de producción africana y, en menor número, de producción oriental.

Los hallazgos en el mar fueron descubiertos por un ciudadano particular que, durante una inmersión, observó restos metálicos a poca profundidad, no lejos de la costa, e informó rápidamente del descubrimiento. Al día siguiente, la Unidad de Arqueología Subacuática de la Superintendencia de Arqueología, Bellas Artes y Paisaje de Sassari y Nuoro, junto con los Carabinieri de la Unidad de Protección del Patrimonio Cultural de Cerdeña y la Unidad de Carabinieri Subacuáticos de Cerdeña, llevaron a cabo un primer reconocimiento en el tramo de mar en cuestión, con la colaboración de la Unidad de Buceo de los Carabinieri de Cagliari y el Cuerpo de Bomberos de Sassari, junto con la Policía Estatal, la Guardia di Finanza y las Capitanías de Puerto. Las inmersiones de los expertos revelaron la existencia de dos macrozonas de dispersión de follis en un gran claro arenoso entre la playa y la posidonia: esta última, por la posición y la morfología del fondo marino, podría contener restos conspicuos de un pecio.

Todas las monedas recuperadas se encuentran en un excepcional y raro estado de conservación. Sólo cuatro piezas están dañadas, aunque siguen siendo legibles. El contexto cronológico de las monedas se sitúa entre 324 (acuñación de Licinio) y 340 d.C. La datación, dice la superintendencia, está confirmada por la presencia de la acuñación de Constantino el Grande y la de todos los demás miembros de la familia presentes como Césares, pero sobre todo por la ausencia de centenarios, acuñados a partir del 346 d.C. El grupo de follis recuperados procede de casi todas las cecas del imperio activas en ese periodo, con la excepción de Antioquía, Alejandría y Cartago. La restauración y conservación de las monedas y materiales recuperados permitirán una comprensión más amplia y profunda del contexto de los hallazgos, de los que aún puede extraerse mucha información.

“El tesoro hallado en las aguas de Arzachena”, afirma Luigi La Rocca, Director General de Arqueología, Bellas Artes y Paisaje, “representa uno de los descubrimientos de hallazgos numismáticos más importantes de los últimos años y pone de relieve una vez más la riqueza y la importancia del patrimonio arqueológico que los fondos marinos de nuestros mares, recorridos por hombres y mercancías desde la antigüedad, aún conservan y preservan. Un patrimonio extraordinario pero también muy frágil, constantemente amenazado por los fenómenos naturales y por la acción humana, sobre cuya protección el Ministerio, a través de la acción de sus estructuras centrales y periféricas, ha desarrollado metodologías y técnicas de recuperación y conservación extraordinariamente eficaces, y desplegado estrategias de valorización innovadoras”.

Extraordinario descubrimiento en Cerdeña: un enorme tesoro de monedas romanas bien conservadas

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