Un fresco de un bodegón en la pared de una antigua casa pompeyana ha salido recientemente a la luz en el marco de nuevas excavaciones enla Ínsula 10 del Regio IX del Parque Arqueológico de Pompeya. El fresco se encontró en el atrio de una casa de la Ínsula 10 de Regio IX que se está excavando actualmente, a la que se anexionó una panadería, que ya había sido explorada parcialmente entre 1888 y 1891 y cuyas investigaciones se reanudaron el pasado mes de enero. Las estructuras excavadas en el siglo XIX y parcialmente expuestas ya sugerían la presencia de un gran atrio con la clásica sucesión de salas en el lado oriental y, en el lado opuesto, la entrada al sector de producción de la panadería. El atrio se limpió de material procedente de las excavaciones del siglo XIX, lo que reveló el derrumbe de los tejados, dentro de la capa de piedra pómez blanca y una porción residual de las capas de flujo volcánico (cineritas) en el sector sur. En las últimas semanas se han encontrado los esqueletos de tres víctimas en las salas de procesamiento cercanas al horno.
Según explican los arqueólogos del Parque, se supone que junto a una copa de vino, apoyada en una bandeja de plata, hay un pan plano de forma plana que sirve de soporte para varias frutas (se puede identificar una granada y posiblemente un dátil), sazonadas con especias o quizá más bien con un tipo de pesto(moretum en latín), indicado por puntos de color amarillento y ocre. En la misma bandeja hay también frutos secos y una guirnalda de madroños amarillos, junto a dátiles y granadas. Este tipo de imaginería, conocida en la Antigüedad como xenia, se inspiraba en los “regalos hospitalarios” que se ofrecían a los huéspedes según una tradición griega que se remonta al periodo helenístico (siglos III-I a.C.). Se conocen unas trescientas representaciones de este tipo en las ciudades vesubianas, a menudo alusivas tanto a la esfera sagrada como a la de la hospitalidad, pero no existe una comparación precisa para el fresco recientemente descubierto, que llama también la atención por su notable calidad de ejecución.
De un pasaje dela Eneida de Virgilio (Libro VII, v. 128 ss.), se deduce la colocación de frutas y otros productos del campo sobre panes de sacrificio que sirven de “cantimploras”: en el momento en que los héroes troyanos comen, después de las frutas, también los panes utilizados como recipientes (cantimploras), se dan cuenta en el epos virgiliano de que se había cumplido la profecía de que encontrarían una nueva patria, cuando “conducidos a costas desconocidas, agotados todos los alimentos”, el hambre les llevaría a “devorar incluso las cantimploras”.
“Pompeya nunca deja de sorprender, es un cofre que siempre revela nuevos tesoros”, comentó el Ministro de Cultura, Gennaro Sangiuliano. “Más allá de la cuestión de mérito sobre la que hablarán los estudiosos, hay que subrayar el valor global de este sitio al que dedicamos nuestros cuidados, con el cierre del Proyecto Gran Pompeya pero también con la puesta en marcha de nuevas iniciativas. La protección y valorización del patrimonio, de conformidad con el artículo 9 de la Constitución, es una prioridad absoluta”.
“Además de la identificación precisa de los alimentos representados”, explicó el director del Parque Arqueológico de Pompeya , Gabriel Zuchtriegel, “encontramos en este fresco algunos temas de la tradición helenística, elaborados posteriormente por autores de la época romano-imperial como Virgilio, Marcial y Filóstrato. Pienso en el contraste entre una comida frugal y sencilla, que remite a un ámbito entre lo bucólico y lo sagrado, por un lado, y el lujo de las bandejas de plata y el refinamiento de las representaciones artísticas y literarias, por otro. Cómo no pensar, a este respecto, en la pizza, que también se originó como plato ”pobre“ en el sur de Italia, y que ahora ha conquistado el mundo y se sirve también en restaurantes con estrellas”.
De las excavaciones de Pompeya surge un fresco de un bodegón. Supuestamente representa una focaccia |
Advertencia: la traducción al español del artículo original en italiano se ha realizado mediante herramientas automáticas. Nos comprometemos a revisar todos los artículos, pero no garantizamos la ausencia total de imprecisiones en la traducción debidas al programa. Puede encontrar el original haciendo clic en el botón ITA. Si encuentra algún error, por favor contáctenos.