Coliseo, la investigación sobre sus cloacas revela los hábitos de los 'aficionados' hace dos mil años

Importantes resultados se desprenden de un proyecto de investigación sobre el sistema hidráulico y las cloacas del Coliseo: el análisis de lo hallado en los antiguos conductos delAnfiteatro Flavio ha permitido, en efecto, fotografiar los hábitos de las personas que frecuentaban este gran estadio de la Antigüedad cuando estaba en uso. Los resultados se presentaron ayer por la tarde durante el encuentro Hidráulica del Coliseo. Presentación de los nuevos datos de la investigación en las cloacas que tuvo lugar en la Curia Iulia del Parque Arqueológico del Coliseo, introducida por el saludo de la Directora del Parque Arqueológico del Coliseo Alfonsina Russo y a la que asistieron los expertos del grupo de investigación que trabajó en la prospección bajo la dirección científica de Martina Almonte, Federica Rinaldi y Barbara Nazzaro.

Se trataba, explicó el Parque en una nota, de un “momento significativo de confrontación, con una fuerte impronta divulgativa, para compartir el fruto de un ingente trabajo, en términos de análisis e investigación, en el que han participado los espeleólogos de Roma Sotterranea Srl -con cargo a la financiación de Grandes Proyectos de Patrimonio Cultural- junto con arquitectos y arqueólogos especializados, utilizando herramientas tecnológicas de vanguardia, empezando por robots guiados por hilos”.

El estudio, además de proporcionar un conocimiento más profundo del antiguo y complejo sistema de gestión del agua del Coliseo, constituye una interesante visión de todo el contexto relacionado con los espectáculos de hace dos mil años y la vida y costumbres de los “aficionados” que abarrotaban el famoso anfiteatro.

Las actividades de estudio, que comenzaron en enero de 2022 con la excavación estratigráfica del colector sur, han supuesto una delicada operación de descubrimiento de casi 70 metros de canal, permitiendo, además del estudio de las características constructivas y de las antiguas funciones hidráulicas, la recogida de una preciosa documentación arqueológica que atestigua las últimas fases de la vida del Coliseo antes del “fin de los juegos” en el 523 d.C. y su abandono definitivo.

Los antiguos conductos han sacado a la luz una copiosa cantidad de hallazgos de semillas y frutos de plantas cultivadas (higos, uvas, melones, aceitunas, melocotones, cerezas, ciruelas, nueces, avellanas y piñones), así como restos de plantas silvestres, como moras: probables restos de comidas ingeridas por los espectadores en las gradas. También son de especial interés las cutículas y fragmentos de hojas de boj y laurel, plantas leñosas de hoja perenne utilizadas con fines ornamentales en la arena durante los espectáculos y/o en los alrededores del Coliseo. Y también huesos de animales como osos, leones, pero también perros que probablemente eran obligados a luchar entre sí en la arena o eran objeto de las venationes, las partidas de caza que, junto con las luchas de gladiadores, entretenían al pueblo romano durante los espectáculos.

Los hallazgos artificiales incluyen dados de juego u objetos de uso personal, como un alfiler de hueso trabajado, pero también prendas de vestir (tachuelas, pinzas de zapatos y fragmentos de cuero), restos de revestimientos de paredes y suelos, así como un llamativo número de monedas de época tardía, nada menos que 53, todas en bronce excepto un sestercio brillante en oricalco de Marco Aurelio emitido en 170-171 d.C. para celebrar los votos decenales del emperador. Su descubrimiento podría sugerir el uso de tales monedas para congraciarse con el favor del pueblo. Un sorprendente hallazgo de arqueólogos contemporáneos para rememorar, más de 1500 años después, la fascinación de aquellos juegos y jornadas.

Entre los objetivos primordiales de la investigación figuraba la necesidad de comprender el funcionamiento de las antiguas cloacas y del sistema hidráulico del Coliseo. De ahí el estudio sistemático del sistema de regimentación de aguas con inspecciones realizadas en los colectores bajo la plaza, con el fin de investigar y conocer el método actual de evacuación de aguas en la sección subterránea del monumento; un problema que siempre ha estado sin resolver, o sólo parcialmente resuelto, y cuyo análisis podría resultar fundamental para la elaboración de estrategias que resuelvan el problema de la evacuación de aguas en una zona delicada como el anfiteatro Flavio.

“El importante trabajo de investigación promovido por el Parque, en colaboración con los mejores institutos italianos e internacionales”, ha subrayado Alfonsina Russo, directora del Parque Arqueológico del Coliseo, “nos ha permitido comprender mejor el funcionamiento del Coliseo en lo que respecta al sistema hidráulico, pero también profundizar en la experiencia y los hábitos de quienes frecuentaban este lugar durante las largas jornadas dedicadas a los espectáculos. Hemos decidido presentar estos resultados en el marco de una jornada de arqueología pública, abierta a la participación de todos, porque creemos firmemente que todas nuestras actividades, desde la investigación hasta la valorización, deben compartirse con los ciudadanos y las comunidades. Este es el primer paso, al que sin duda seguirán la edición científica y la publicación de los datos”.

En la foto: un desagüe de esquina del Coliseo.

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