Civitavecchia, los Carabinieri encuentran en el mar los restos de un antiguo barco romano

Las costas del Lacio siguen asombrando y devolviendo importantes descubrimientos como el pecio de la nave romana identificado en los últimos días frente a las costas de Civitavecchia por la Sección de Arqueología del Departamento Operativo de los Carabinieri para la Protección de los Bienes Culturales, asistida por el Centro Carabinieri Subacquei de Génova y Roma, con la ayuda de la patrullera de alta mar de la Compañía de Civitavecchia, coordinada por la propia Fiscalía de Civitavecchia y bajo los auspicios de la Oficina Nacional del Patrimonio Cultural Subacuático de Taranto.

Los medios técnicos del Centro Carabinieri Subacquei di Genova y del Nucleo Carabinieri Subacquei di Roma, equipos y medios específicos para este tipo de operaciones, permitieron localizar el pecio y realizar filmaciones y fotografías como prueba de la importante operación. Se trataría de un antiguo navío honorario romano de los siglos II-I a.C., que yacía en el fondo del mar a 160 metros de profundidad, todavía en buen estado y con un cargamento repleto de ánforas consideradas de gran valor por cantidad y contenido.

Para cartografiar el lecho marino del yacimiento arqueológico se utilizó el famoso Rov, el robot submarino “Vehículo teledirigido”, gracias a su sonar y ecosonda, y también gracias a la patrullera de altura de los Carabinieri de Civitavecchia (clase N 802 “Frau”). En las proximidades del pecio se encontraron también dos troncos de ancla romanos de metal perfectamente conservados.

Se trata de un descubrimiento de gran importancia, a poca distancia de la costa, que permite hipotetizar otras tantas situaciones a lo largo del litoral del Lacio, en la época de los Farsi, lugar de gran tráfico naval de la potencia romana entre rutas comerciales y militares.

Para ser precisos, los Carabinieri informan de que el pecio yace a unos 160 metros de profundidad en el lecho marino arenoso, con un cargamento de centenares de ánforas romanas del tipo “Dressel 1 B”, la mayoría de ellas intactas, formando un depósito de 12 metros de ancho por 17 de largo, de lo que se deduce que la nave podría haber tenido más de 20 metros de eslora.

Estas dimensiones indican también el carácter excepcional del hallazgo, hasta el punto de que la Superintendencia Nacional de Bienes Culturales Subacuáticos (con sede en Taranto) ha iniciado los procedimientos necesarios para inspeccionar y salvaguardar la zona arqueológica sumergida y descubrir los detalles aún desconocidos del barco y su carga.

Civitavecchia, los Carabinieri encuentran en el mar los restos de un antiguo barco romano

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